Canal Colinas del Sol

Mención honorífica

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Taller ID

México, 2018

250 m lineales

355 m2 de área intervenida

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El canal de Colinas del Sol desagua históricamente, de una manera racional y dosificada, a un sistema de pequeñas ciénagas en donde los habitantes locales indujeron agricultura moderada y que denominan a dicho desalojo de agua como “sangrías”. En una segunda función, el agua conducida por el canal tiene relación con jagüeyes que retienen agua para uso agrícola y aprovechamiento ambiental, operando entonces como un suministrador de agua. La ruta de la línea de agua cruza de manera casi tangencial a una zona recientemente urbanizada, que en su estado original ha sido un referente de la población como un oasis de humedad en temporada de estiaje y como un cuerpo de regulación de crecientes locales en temporada de lluvias, siendo entonces un conector social, de la flora y de la fauna del lugar.

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Este proyecto potencializa, más allá de la restauración-regeneración-recuperación, un cuerpo de agua en un parque urbano, entendiendo su ciclo hidrológico particular y su origen cultural. Enmarcado dentro de un programa de “rehabilitación física y social” de espacios públicos urbanos en zonas de alta marginación, se contó con la oportunidad y la libertad de hacer un manejo hidráulico y paisajístico del canal, replicando las retenciones espaciales, los cursos con márgenes tratadas que generan rumores de agua y ecosistemas de vegetación y fauna riparia, desvíos para generar brotes sorpresivos que dan lugar a líneas y circunferencias de agua en el programa arquitectónico y resuelve dos necesidades hidráulicas: la separación de aguas sanitarias y el desalojo funcional y naturado de las aguas pluviales que generaban encharcamientos en los espacios deportivos.